
Salud ocular en la adolescencia
23 Enero 2025
La adolescencia es una etapa de cambios físicos y emocionales muy importantes. A medida que el cuerpo se desarrolla, también lo hace la salud visual, que puede verse afectada por hábitos que, sin darnos cuenta, podemos ir adoptando en nuestro día a día. Prestar atención a la salud de los ojos durante estos años es fundamental para prevenir problemas que podrían acompañarnos en la edad adulta. A continuación, veremos por qué es importante el cuidado de la visión en la adolescencia y cómo podemos protegerla.
1. Cambios visuales durante la adolescencia
Durante la adolescencia, el ojo continúa su proceso de crecimiento y desarrollo. Este período puede coincidir con la aparición o el empeoramiento de ciertos defectos refractivos, como la miopía, hipermetropía o astigmatismo. En el caso de la miopía, por ejemplo, es frecuente que aumente durante la pubertad debido al crecimiento del globo ocular.
Además, el ritmo de vida adolescente conlleva nuevas actividades y un mayor uso de dispositivos electrónicos (teléfonos móviles, tabletas y computadoras) tanto para el estudio como para el entretenimiento. La exposición prolongada a pantallas puede ocasionar síntomas de fatiga visual, ojo seco e incluso dolores de cabeza.
2. Riesgos y problemas comunes
- Miopía en aumento: el uso continuo de dispositivos y la falta de exposición a la luz natural se han relacionado con el aumento de la miopía. Cada vez se observan más casos de “miopía escolar” o “miopía juvenil”.
- Fatiga visual digital: fijar la mirada en pantallas durante mucho tiempo puede provocar ojos rojos, irritación, visión borrosa y cefaleas. Esto se conoce como “síndrome visual informático” o fatiga visual digital.
- Sequedad ocular: el parpadeo se reduce al mirar pantallas, pues, de manera inconsciente, parpadeamos menos cuando nos concentramos en dispositivos electrónicos. Esto puede provocar sequedad ocular o sensación de arenilla y escozor.
Para cuidar tu visión:
- descansa la vista cada 20 minutos mirando un punto lejano (regla 20-20-20);
- mantén la distancia adecuada con dispositivos (35-40 cm para el teléfono y 50-70 cm para la computadora);
- parpadea con frecuencia para prevenir la sequedad ocular, asegúrate de contar con buena iluminación y evita contrastes bruscos;
- pasa tiempo al aire libre para favorecer la salud visual y regular tu ritmo circadiano;
- realiza revisiones oftalmológicas al menos una vez al año para detectar problemas de manera temprana;
- limita el uso de pantallas antes de dormir para no alterar tu descanso;
- mantén una dieta equilibrada que incluya frutas, verduras ricas en antioxidantes y alimentos con omega-3 para proteger tus ojos.